Tres razones para leer libros
En este breve artículo nos gustaría defender tres ideas importantes por las que deberíamos siempre fomentar la lectura (especialmente durante nuestra niñez y juventud). Además los innumerables listados de libros recomendados tanto por expertos como por lectores, existen múltiples razones y podríamos hacer una lista enorme con todos los beneficios que aporta la lectura, pero para no aburriros, solo nos centraremos en tres que consideramos esenciales.
La primera razón es porque la lectura ayuda a nuestro cerebro con el aprendizaje, a la vez que se van desarrollando dos aspectos que resultan enormemente valiosos en nuestra evolución como personas: el pensamiento crítico y la imaginación. El pensamiento crítico es esa habilidad que nos permite observar un hecho o una situación desde distintas ópticas y conocerla con toda su profundidad, siendo capaces de analizar la información y obtener la verdad de un hecho de forma objetiva. Esta capacidad es algo que habría que potenciar en todo individuo sobre todo en esta época de la posverdad en la que nos encontramos inmersos y en la que las noticias falsas, los bulos y las manipulaciones informativas (políticas, mediáticas, ...) están presentes a diario en nuestras vidas.
La imaginación, entre otras cosas, nos ayuda a mejorar la capacidad de resolución y la aplicación de conocimientos en un campo determinado en otro distinto para obtener resultados positivos. La imaginación nos invita a soñar. Nos ayuda a cambiar la realidad y a expresarla de mil maneras distintas. Nos ayuda también a visualizar todo aquello que leemos, llegando incluso a ver en nuestra mente objetos, lugares o sensaciones que nunca hemos conocido de primera mano.
La segunda razón en defensa de la lectura sería que leer mejora también nuestra capacidad de comunicación y de empatía, algo que en un mundo polarizado y repleto de conflictos nos ayuda a ponernos en la piel de los demás y a comunicarnos de manera asertiva. La empatía es una característica muy valorada en el ser humano, ya que nos permite ser capaces de entender a otra persona y apoyarla, incluso aunque sus opiniones sean opuestas a las nuestras.
Por último, y posiblemente uno de los puntos más importantes de la literatura de ficción, la lectura nos ayuda a evadirnos de nuestro día a día, alejarnos o distraernos de nuestros problemas, y por un rato nos permite introducirnos en la mente de otras personas y vivir aventuras o situaciones que nos entretienen consiguiendo así el objetivo que ansía todo libro de ficción: la suspensión de la realidad.
He aquí tres razones que hemos considerado básicas en la defensa de la lectura. Existen infinidad de ellas, pero como muestra bien vale un botón. Esperamos que cada uno de vosotros y vosotras encontréis vuestro propio camino que os conduzca a la lectura.